¿Cómo empezó?

Mi historia

Follow Your Desire, SRL Coaching nació en la mitad de un viaje de introspección en la búsqueda de mi yo verdadero mientras recorría los pueblos costeros del sur de Oaxaca, México. A pesar del paraíso indiscutible en donde estaba, el encanto se desvaneció y me encontré queriendo algo diferente, pero no tenía una buena razón para irme. ¿Por qué alguien querría dejar el paraíso? Pero yo sentía el impulso de continuar.  Estuve una semana convenciéndome de quedarme. Pensé que si no podía ser feliz bajo el sol de una playa oaxaqueña no podría serlo en ningún lugar. 

Un amigo me recordó que “el hogar es donde estamos”, así que me quedé e ignoré la sensación de querer irme. No fue hasta que, sin motivo aparente, muchas sincronicidades pequeñas se alinearon hasta prácticamente echarme de la ciudad que ¡por fin! escuché. Una vez que lo hice, algo en mí hizo clic, y mi viaje siguió fluyendo, para ser el recordatorio que necesitaba sobre que la intuición es real, el deseo es poderoso y debemos escuchar cuando habla. 

Esta experiencia hizo que me preguntara cuántas veces me había convencido de no seguir mis deseos verdaderos por temor a que fueran demasiado buenos. La vida no dejaría que obtuviera lo que deseo. ¿O sí?

Recordé cada vez que había estado en una relación con pensamientos similares en mi mente durante meses antes de atreverme a hacer algo con ellos. Ya sea que quería dejar una relación, cambiar una dinámica o introducir algo nuevo. Este momento fue un recordatorio de todas las veces que había ignorado los sabios mensajes que mi mente, cuerpo y espíritu me enviaban.


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El poder del deseo puede ser aterrador. Más aún expresarlo y seguirlo. Al final, terminamos atrapados en una forma de ser que se siente limitada, ya sea porque flaqueamos en nuestra confianza o por nuestra falta de coraje para seguir nuestros deseos. 

¿Y acaso podría ser que nuestro mayor miedo sea conseguir lo que queremos?

Resulta que nos encajonamos en patrones antiguos por los miedos que nos ayudaron a sobrevivir en el pasado. Irónicamente, son estos mismos patrones que nos ayudaron a sobrevivir en nuestras familias mientras creciamos que ahora sabotean nuestras relaciones en el presente. 

Tenemos que reconfigurar nuestras mentes y nuestros corazones para abrirnos a personas confiables y entregarnos a nuevas relaciones.

Este es un trabajo acumulativo y gratificante mientras vemos cómo nos abrimos de nuevo al mundo. No es posible cambiar lo que pasó, solo podemos cambiar cómo elegimos actuar en el momento presente
— Lindsey Aronson
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